Después de la muerte de su marido, Kimika vivía una vida solitaria. Cada vez que hago mis tareas diarias, me siento solo. El hermano del difunto marido de Kimika viene a visitarla. Kimika ve a Iwao como su marido muerto. Aunque pensó que no era bueno, superpuso su cuerpo con el del hermano de su marido, Iwao, y llegó al clímax repetidamente frente a la fotografía del difunto... Ella le dice que su marido, que ya murió, seguramente lo entenderá.