Una masajista casada le muestra una ``gran polla'' a un cliente quien le pide que se la ``saque'', y aunque ella le dice ``no puedo brindar servicios sexuales'', se pone cachonda cuando lo hace sostener su pene completamente erecto. No se lo diré a la tienda, dijo, pero también la acariciaron y se corrieron, y le arrojaron una gran polla, haciéndola llegar al clímax una y otra vez.