Una hermosa mujer en un café me sedujo. Me estabas mirando, ¿verdad? Ahora eres igual de culpable, dijo mientras me lamía la polla. Déjame salir Exprimí el semen. ¡No puedes hacer esto! En el tren, en el ascensor, en el trabajo, en tu vida diaria, una bella mujer que te mira a los ojos te seducirá con valentía.