Una mujer casada que vivía sola y separada de su marido quería a su cuñado quien la ayudaba en su vida, pero este se enteró de su existencia... Nee-san, si vas a salir con él, me gustaría que me devolvieras los 3 millones de yenes que te pagué hasta ahora... ¡Eso es imposible! Tú también eres una mujer todavía. Seré tu compañero. No me toques más, pipí.